En una jornada cargada de emoción y compromiso comunitario, los fieles de San Expedito celebraron su día con una misa y un locro popular en la gruta ubicada en el barrio. La iniciativa, impulsada por vecinos y devotos, fue el resultado de meses de trabajo y colaboración. “Hoy pudimos festejar a San Expedito en su gran día y nosotros recontentos porque todo salió lindo”, expresó Noelia Julián, una de las organizadoras del evento. La celebración incluyó una misa y un almuerzo comunitario que reunió a numerosos vecinos y devotos.
Noelia también destacó el esfuerzo colectivo que permitió concretar el sueño de tener una gruta en el lugar: “Venimos trabajando ya hace tres años en este lado de la gruta. Todo fue esfuerzo de todos, porque tuvimos lota, rifas, e hicimos diferentes cosas para lograrlo”.
Pablo, uno de los colaboradores, también resaltó la importancia de estas iniciativas. “Un año más acá con Noelia y todos los devotos, haciendo algo para la gente y queriendo que esto sea cada vez un poco más grande”, dijo. Señaló además que su participación, como la de tantos otros, tiene como objetivo fortalecer el sentido de comunidad: “La idea es que esto sea más grande, que vaya creciendo cada año y compartir con la gente”.
Ambos coincidieron en agradecer a quienes se sumaron a la celebración. “El mensaje es de gracias, porque también esto es gracias a ellos”, remarcó Pablo, quien destacó especialmente la dedicación de Noelia y el compromiso de los vecinos.
La jornada fue, sin dudas, una muestra del poder de la fe y del trabajo colectivo para mantener vivas las tradiciones y fortalecer los lazos barriales.
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